lunes, julio 12, 2010

POCO A POCO, VAMOS ENCONTRANDO LA CALMA
Enviado por Marcelo Sepulveda Oses el 12 Julio 2010
Después de un primer semestre caótico, plagado de experiencias y situaciones límites al borde de la desesperación. Después del dolor y la tragedia, después de la tristeza y el desconsuelo, volvemos a caminar, a transitar por esta existencia terrestre esbozando alguna sonrisa, creyendo en la buena ventura y en un mejor porvenir.

Señalo esta apreciación, quizás un tanto personal y subjetiva (propia de la experiencia personal) porque durante la última semana tuve la oportunidad de asistir y presenciar variados eventos, de diversa índole, que me llevan a proponer un remanso entre la tempestad, una luz, un atisbo de brillo al concluir la primera mitad del año.

Me refiero a la visita que hiciera a nuestra zona la Santísima Virgen Del Carmen, Madre del Consuelo, del regocijo y la bendición. De viaje, en travesía cruzando el Atlántico desde el Viejo Continente, desde el sur de Chile a la zona central. Por la mañana, en Parral, enterándose de nuestros pesares, recorriendo las calles, mirando los sitios desiertos allí donde hubo un hogar y una familia, una historia personal y colectiva. Por la tarde noche, visitando el Pueblo de Copihue que le recibe con un arco de Triunfo y velas encendida, rezando el Santo Rosario, demostrando alegría con vítores y cantos. Le escoltan Bomberos, los mismos trabajadores incansables en los días posteriores al Terremoto, le escoltan Carabineros de Chile con balizas encendidas en una caravana de fe y profunda devoción cristiana.
La Madre de Chile se encuentra con los pobladores, con las comunidades cristianas guiadas por su Pastor el reverendo Señor Obispo de la Diócesis de Linares Monseñor Tomislav Koljatic, hombres y mujeres, niños, jóvenes y adultos mayores reunidos en torno a la imagen de María y su hijo en brazos, el Niño Jesús que vienen a regalar consuelo, paz y amor a los benditos desposeídos, a los necesitados, hambrientos y sedientos y todos aquellos de corazón limpio, todos los seres de buena voluntad. El Colegio Providencia le cobijó durante la noche del lunes pasado para salir en procesión durante la mañana a entregarla a las comunidades de nuestros vecinos en Cauquenes, gracias Madre Nuestra y continúa acompañándonos desde el Reino De Dios.

También así, deseo hacer mención de la celebración del Natalicio de Don Pablo Neruda, poeta de Parral y el mundo, reconocido en su tierra natal por sus coterráneos. La presencia de Pedro Yáñez y acompañamiento dio realce a esta ceremonia con un espectáculo variado que contempla dos momentos distintos: La poesía de Neruda en canción, canto y payas populares y los temas clásicos del repertorio del folclorista. La Ilustre Municipalidad de Parral, a través del Departamento de Cultura, organiza esta actividad que contempló un buen vino navegado y exquisitas sopaipillas. En mi opinión personal, creo se cumplió a cabalidad con la propuesta de homenajear al poeta Pablo Neruda en su 106º conmemoración de nacimiento. Parral debe encontrarse con el cantor, con el artista que recorre el mundo entero para ubicar a la Villa Reina Luisa Del Parral en las cumbres más altas de la literatura universal.

Mención final se merece el eclipse de sol que muchos pudieron presenciar en Isla de Pascua y parte del territorio nacional continental, podría ser buen augurio, una buena señal como en tiempos antiguos en la historia de la Humanidad.

Estimados amigos lectores, a pesar de todos los pesares, tenemos razones suficientes para seguir creyendo en la vida, esperanzas y fe en un futuro mejor para todos.

Marcelo Sepulveda Oses

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