15 DE MAYO 2007
REAPRENDAMOS LA RISA
El hombre, ser, compuesto de mente, cuerpo y espíritu, transitando este planeta convulsionado, plagado de tecnología, compitiendo a cada instante con los otros, regido por el individualismo, el materialismo y el consumo compulsivo; asumiendo, constantemente, la pérdida de la capacidad de asombro, la preocupación por los demás, la solidaridad, el amor al próximo; se encuentra a sí mismo desprotegido, vulnerable, débil frente a la inmensidad, uno más en la sumatoria de tantos. Ante esta realidad incuestionable, premisa validada en los diferentes estamentos de nuestra sociedad, es pertinente, perentorio volver nuestros ojos a la cosas simples de la vida, al sur inmenso que nos cobija, la lluvia en el mes de mayo, el Longaví imponente que escolta nuestro valle, la siembra de arroz, el trigo, la mazorca, la tierra, nuestros árboles y la risa. Sí, la risa, aquella emoción propia y particular del ser humano, sensación que aborda todo nuestro ser, cura las enfermedades por más catastróficas que estas sean o nos permite sobrellevarlas de mejor manera.
El hombre, ser, compuesto de mente, cuerpo y espíritu, transitando este planeta convulsionado, plagado de tecnología, compitiendo a cada instante con los otros, regido por el individualismo, el materialismo y el consumo compulsivo; asumiendo, constantemente, la pérdida de la capacidad de asombro, la preocupación por los demás, la solidaridad, el amor al próximo; se encuentra a sí mismo desprotegido, vulnerable, débil frente a la inmensidad, uno más en la sumatoria de tantos. Ante esta realidad incuestionable, premisa validada en los diferentes estamentos de nuestra sociedad, es pertinente, perentorio volver nuestros ojos a la cosas simples de la vida, al sur inmenso que nos cobija, la lluvia en el mes de mayo, el Longaví imponente que escolta nuestro valle, la siembra de arroz, el trigo, la mazorca, la tierra, nuestros árboles y la risa. Sí, la risa, aquella emoción propia y particular del ser humano, sensación que aborda todo nuestro ser, cura las enfermedades por más catastróficas que estas sean o nos permite sobrellevarlas de mejor manera.
Nuestro Nobel de Literatura Pablo Neruda escribio en Los Versos del Capitan
Tu Risa
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Ríete, ríete, te hace bien. “La risa remedio infalible” se titulaba un artículo en la prestigiosa revista mensual Selecciones del Reader's Digest. La risa recupera el aparato inmunológico, mejora la ventilación pulmonar, estabiliza nuestro estado de ánimo, produce mejores relaciones interpersonales. Cada uno de nosotros, sin distinción, a través de la risa puede alcanzar una vida saludable, cobijar armonía, quietud, la paz duradera de un espíritu calmo en un cuerpo descansado para meditar el futuro, los proyectos de vida, el nuevo mundo del mañana. Descansemos nuestra mente agobiada en la sonrisa amplia de los niños, en sus juegos de piratas y unicornios, en lo cotidiano de una flor vestida por la mano de Dios.
Marcelo Nicolás de Jesús
Vinculos relacionados con el autor de este artículo don Marcelo Sepulveda Oses:
Marcelo Nicolás de Jesús
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- Presentación texto del poeta Edgardo Alarcón "Cantos de Tierra"
- Ejercicio de compresión lectora del libro "Bodas de Sangre"
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