Estudiando el libro de Lenguaje y Comunicación de 2º año Medio, distribuido por el Ministerio de Educación los años 2006-2007, me encontré con la Unidad sobre “La información en los medios de comunicación” que se actualiza y asume vigencia en el tiempo actual, las citas encomilladas proviene textualmente del mencionado texto para el estudiante.
Al definir, Medio de Comunicación de masas, nos referimos a “aquellos que son capaces de transmitir gran cantidad de información para muchas personas situadas a distancia y separadas de sí.” Están constituidos básicamente por: La prensa, la radio, la televisión e internet. Hoy en día, nos informamos de modo casi inmediato sobre sucesos y acontecimientos que ocurren en cualquier parte del mundo, se nos muestran eventos técnicos y científicos; se ofrecen noticias, documentos de arte, música, cine, deporte, juegos…y todo tipo de opiniones. “No obstante la atracción que ejercen, estos medios suscitan también recelos. Se teme que puedan ser utilizados para fines propagandísticos y manipuladores. Este temor no es nuevo, como no es nueva la aparición de medios técnicos paras comunicar masivamente.” Sócrates, en su tiempo, se quejó de los males que derivarían de la aplicación de la escritura a la difusión de conocimientos, y muchas personas consideran diabólica la invención de la imprenta.
Es crucial poseer un sentido crítico sobre la información que se produce a través de los Medios de Comunicación de Masas, filtrar todo aquello que pudiese ser comprendido como manipulación o censura, valorar objetivamente cada Medio y construir una opinión personal sobre lo que se nos informa.
Tras cada Medio existe un “componente humano responsable y no entidades abstractas o vagas naturalezas situadas en un más allá desconocido.” “Tras la letra del periódico, la pantalla de televisión o el micrófono de la radio se hallan personas de carne y hueso, con ideología propia, que aspiran a obtener unos resultados concretos con su emisión o publicación, instituciones que propagan sus ideas y valores a través de ellos y, sobre todo, empresas cuya finalidad primordial es rentabilizar económicamente esa actividad. Todo ello constituye un complejo entramado en el cual puede perderse con frecuencia el objetivo fundamental (entretener, informar, educar, etc.) o supeditarse a otros intereses que relativicen los valores positivos que deberían derivarse de su utilización.
A continuación, nos referiremos a dos males que pueden afectar la imparcialidad de los Medios de Comunicación y su objetividad:
“La censura; que es intervención de instituciones sociales, públicas, privadas o religiosas que restringen o regulan la entrega de información. Los organismo de censura pueden reprobar contenidos e impedir su difusión por considerarlos contrarios a la mortal, la cultura, la religión, la política u otros aspectos dignos de resguardo según los criterios del censor.”
Al referirnos a la manipulación de la información podemos concluir que; consiste en intervenir la información modificándola, para favorecer una posición o pensamiento determinado. De acuerdo con estos fines se organiza e interpreta la información de modo que logre crear el efecto esperado.”
De acuerdo a la declaración universal de derechos humanos “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones y de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.”
En el mundo moderno hablamos de “la supercarretera de la información” en la cual, los nuevos medios abren infinitas posibilidades de comunicación, pero debemos cuidar no depender exclusivamente de propósitos importante como pueden ser, la entretención y los negocios.
Protejamos y resguardemos nuestros medios, especialmente, aquellos de carácter local, ciudadano y participativos para que apliquemos, correctamente, el sentido de la libre expresión, respeto y tolerancia, responsabilidad ante nuestras opiniones y que se garantice el derecho a estar veraz y oportunamente informados.
Marcelo Sepúlveda Oses
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